El genocidio de Donostia de 1813. Mikel Urkola

Respuesta a Francisco Góngora: EL Genocidio de Donostia de 1813

Se trate o no de un pseudónimo, bajo el nombre de Francisco Góngora ha aparecido en el Correo Español con fecha de….….-recogido luego en internet- un artículo que entra en el debate de la destrucción de Donostia de 1813. Pongo en negrita y subrayado como títulos las frases de dicho señor. El resto es mío.

Liberación”:

Sr, Serrats: habla Ud. dos veces de “liberación”. ¿Cómo puede Vd. llamar liberación a la matanza de más de 1000 civiles inermes e inocentes, destrucción e incendio total de la ciudad, violación de casi todas las féminas (niñas, jóvenes, casadas y ancianas), a la hambruna y peste que siguió al dejar a los ciudadanos expoliados, sin recursos económicos y sin techo a sus habitantes?

desastre (toma de la ciudad e incendio posterior ) el 31 de agosto. “prácticamente destruida”.

Sr. Serrats: ¿Por qué llama desastre a lo que fue “genocidio”? “Desastre”, puede decirse de un fenómeno natural como tempestad, inundación, volcán, terremoto, incendio involuntario. Ud. se olvida, además, que no fue cuestión de un día, sino de una larga y angustiosa semana; no fue un suceso aislado, fortuito, imprevisible e irremediable. Un genocidio que los jefes hicieran lo posible por evitarlo y luego fueran castigados sus responsables.

Álava había vivido otros asaltos militares, como los de Ciudad Rodrigo y Badajoz”.

Por eso mismo, Sr.Serrats. El genocidio de Donostia estaba ya previsto y anunciado. ¿Por qué no pusieron remedio quienes tenían autoridad, obligación y poder para ello? No estamos hablando de espontáneos civiles que toman las armas por su cuenta y riesgo, sino de ejércitos regulares, jerarquizados, disciplinados, que cumplen órdenes, controlados por gobiernos de Estados soberanos

es inconcebible que alguien se permita analizar la historia con una interpretación política propia de 2012.

Mire Vd. La perspectiva histórica es necesaria para condenar el mayor crimen de la tristísima historia de la humanidad: la conquista-imperialismo. Ahí tiene Vd. las calles de Donostia dedicadas a conquistadores imperialistas españoles. ¿No es eso apología del crimen?

Le invito, Sr. Serrats, a unirse conmigo a pedir sean borrados de las calles de Donostia los nombres de todos los conquistadores, los de aquí y de ultramar. Se trata de erradicar el mayor de los crímenes, bendecido durante seis mil años. ¿Quiere Vd. que empecemos a contar los grandes genocidios cometidos por el imperialismo español y francés? Sr. Serrats: no solo no es inconcebible, sino necesario aprender de la experiencia histórica, desterrar para siempre los horrores de la conquista-imperialismo y reconocer el derecho de autodeterminación de los pueblos. Condenar el naciocidio de Euskalerria, su conquista; el sometimiento esclavo de aquellos pueblos que no son reconocidos como sujetos identitarios, culturales y políticos.

Dicen que la historia la escriben los vencedores pero que Dios nos libre de la que escriban algunos supuestos perdedores”.

¡Menudo final Sr. Serrats! Los perdedores de la batalla de Donostia fueron los imperialistas franceses. Los aliados fueron los imperialistas ganadores y genocidas. Pero los donostiarras ni ganaron ni perdieron esa batalla en la que no tomaron parte. Simplemente fueron víctimas inocentes de una guerra entre imperialistas. Supongo que no se identificará Vd. con los ganadores genocidas. Estamos hablando de un genocidio y Vd. habla de perdedores como si estuviera jugando a soldaditos o un partido de pelota.

Así hablan los ejércitos, Ministros de Interior, policías, el PP-PSOE que dicen que han ganado. ¿Por qué? Porque mantienen esclavizado y oprimido a Euskalerria. En eso consiste su victoria. Se trata de un milenario proyecto –más allá de una estrategia- de nación imperialista que nos condena a ser víctimas de su conquista militar. Es el proyecto imperialista godo, castellano, español y franco. No se trata de un acuerdo de los Ministros de Interior hispano-franceses de la semana pasada. No se trata solo de una batalla, un episodio desgraciado, una escaramuza. Se trata de un proyecto imperialista matapueblos que tiene momentos muy trágicos como 1200 (conquista de Gipuzkoa, Araba, Bizkaia), 1512 (conquista de la Nabarra residual), 1813, 1936-1937, 1978 (fecha de la Constitución que consagra la intervención militar para impedir nuestra liberación nacional). Son escalones de una misma historia.

España y Francia no renuncian a ser imperialistas matapueblos y legitiman sus propósitos en aras del criminal derecho de conquista. Para la paz entre las naciones, lo primero que hay que aprender es el Derecho de Autodeterminación de los pueblos, proclamado por el art. I de los Derechos Políticos y Sociales de la ONU. Quien no reconozca este derecho es, mentalmente, un violador de derechos humanos elementales.

Mikel Urkola.

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4 Responses to El genocidio de Donostia de 1813. Mikel Urkola

  1. egilea: f.gongora

    O sea, si no entiendo mal. El genocida imperialista matapueblos de Alfonso VIII urdió en 1200 la idea de borrar del mapa, que luego siguieron otros españolazos (¡ Perdón, que entonces eran reinos de Castilla, León, Aragón, Córdoba, pues España no existía, pero es igual ya se les veía las intenciones¡ ) por los siglos de los siglos, de la buena gente de Alava, Gipuzkoa y Bizkaia, seres angelicales y bondadosos que se dedicaban solamente a sobrevivir, que nunca cogieron las armas, ni se aliaron con el rey más fuerte, ni se han matado entre sí a lo largo de la historia, Euskal herria desde el principio de la historia podía haber sido un paraíso terrenal, pero estos cabrones de españoles se encargaron de estropearlo todo. Y el general Alava, otro españolazo, de Vitoria de toda la vida, pero imperialista matapueblos al fin, descendiente de Alfonso VIII del que conocía como es sabido en todas las enciclopedias sobre medievalismo sus ideas imperialistas, convenció al inglés para que destruyera una vez más la incipiente nación vasca quemando Donostia Es que no la dejaban desarrollarse, oye. Te has olvidado de los romanos, de los cartagineses, de los bárbaros, visigodos, esos sí que eran matapueblos. Por no hablar de los cromagnones que echaron de sus cuevas a los neanderthales vascos blandiendo la bandera del imperialismo.
    ¡¡¡Vaya paranoia que te has inventado. Espero que no seas historiador Mikel porque tendrías la misma credibilidad que Zapatero o Rajoy dando lecciones de economía a un parado!!!!! ¿De verdad que os creéis eso que queréis contar.? A ti la historia te importa un huevo. Es como un juego para acabar pidiendo la independencia. Empieza por ahí y ahórrate todas las chorradas que has escrito con criterio historicista.

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